martes, 22 de junio de 2010

Mil excusas, mas o menos.

Excusas ante la insostenible situación de este, mi blog:

1. No tengo ADSL en casa y actualizar con la Desi es más laborioso que en el PC.

2. Soy una maruja novata y todavía tengo que encontrar el equilibrio entre las tareas del hogar y el tiempo de ocio.

3. Ya sí que sí es verano y hay muchas más cosas que hacer por las tardes.

4. El finde en Avilés entre sidra, cabrales y buenos amigos, de relax total, tampoco me ha dejado mucho tiempo para actualizar.

Tras estas tristes excusas, mis más sinceras disculpas a los escasos, pero muy necesarios para mí, seguidores de este blog. Intentaré enmendarme en los próximos días.

De verdad.

Y un poco de musicote para compensar.



PD: Increíble el concierto de Muse. Merece la pena verles aunque sea una vez en la vida :)

lunes, 14 de junio de 2010

Fúrbol y esas cosas.

El otro día iba por la calle en buena compañía, reflexionando de la vida, el paso del tiempo y el por qué de todas las cosas y dije en voz alta: Creo que me estoy haciendo mayor. Últimamente me gustan más los entrenadores de fútbol que los futbolistas (Sí, iba pensando en hombretones guapos, no lo voy a negar ahora. Pero lo otro quedaba mejor). A lo cual me contestaron: Dicen que te haces mayor cuando dejas de mirar a las parejas de tus amigas y empiezas a mirar con buenos ojos a sus hijos... Lo cual me dejó mucho más tranquila. O no. En serio, ¿me estás diciendo que cuando tenga cuarenta o cincuenta años le haré ojitos a los hijos de...? :S

Bueno, a lo que iba. Como hace mucho tiempo que no hago una entrada de hombretones guapetones, voy a hacer una de entrenadores de fúrbol. Por dos razones: a) Porque los ránkings de futbolistas están muy vistos ya, y b) Porque me sale del higo.

Voy p'allá:

En el número 5 (porque esto es un Top 5, que tampoco se ha llevado a cabo el cambio generacional del todo y no es plan de poner al sabio de Hortaleza o a Clemente) está... Unai Emery, porque yo lo valgo. Pues eso. Piensen por un momento en otro entrenadores de fútbol: Los citados Clemente o Aragonés, en Vicente del Bosque, Camacho o Van Gaal... Sí, creo que Emery merece estar en esta lista, aunque no encuentre suficientes razones.

En el número 4 tenemos a... Michel. Sí, porque es un tocapelotas, pero el tío tiene buena percha y un tupé que ya quisieran muchos cuarentones para sí. Y también porque frases como "Si llega a entrar es gol" tienen que pasar a la posteridad, sí o sí.

En el número 3 he elegido a... Mourinho. Porque tiene una pinta de chulo que no puede con ella, porque es un bocazas y porque lleva las canas con mucho salero. Ya veremos si tiene buena mano para controlar a Ronaldo y compañía.

En el segundo puesto tenemos a... Quique Sánchez Flores. Porque va siempre hecho un pincel, tiene estilazo, es un morenazo y ha hecho con el Atleti lo que nadie ha podido en muchismos años. Y olé.

Y en el número uno, guan, como no podía ser de otra manera, está Pep. Porque está como un queso, es culto, tiene una voz susurrante y profunda, se deja esa barbita de tres días, tiene ese hoyuelo en la barbilla y esos ojos tristones, le queda el traje como un guante... ¡Ayomá! Que me da igual que se esté quedando cartoniano o que Víctor me diga que se parece a Tom Hanks en Filadelfia (sí, es un poco joputa), que digan lo que digan es lo más bonico que ha pisado el cesped de un estadio de fútbol y sanseacabó.

Y ya.

PD: ¿Se ha notado mucho que la entrada era una excusa para regodearme en lo que me gusta Guardiola? :P

lunes, 31 de mayo de 2010

Veranico (casi) de verdá de la buena.

Ains, qué calorcicoquetetorras que ha hecho hoy... Qué gustico me ha dado. Y eso que quedan unos pocos días para el tan afamado cuarenta de Mayo, pero ya nos estamos acercando a temperaturas veraniegas a marchas forzadas. Voy a ver si este puente que se acerca* le doy algún día a la piscina, que ya tengo ganas de torrarme cual lagartijilla.

La verdad es que este final de mes ha sido bastante bueno, si paso por alto el catarro-faringitis-tos perruna que llevo arrastrando dos semanas ya. Pero en líneas generales han sido dos semanas cojonudas: he disfrutado un montón de mi casita, he hecho un poco de maruja, hemos organizado cenitas y viciadas al Guitar Hero variadas, copazos con charlas trascendentales en buena compañía hasta las tres de la mañana, ratitos de sofá a dos con mimos (¡siempre mimos!), y otras cosillas de la independencia que molan un montón.

Lo único que llevo un poco mal es que hoy he terminado mi rotación en infanto-juvenil y me da bastante penita. La verdad es que me ha gustado un montón trabajar con niños y he aprendido mucho de mi adjunta, así que me da morriña tener que dejarlo. Mañana de vuelta al hospi, a ver qué me depara mi siguiente rotación. Voy a ser la primera residente que la haga, así que me da en la nariz que voy a estar un poco perdida. Pero bueno, pensaré en las ventajas que tiene: ritmo de trabajo más relajado, horario de ocho a tres todos los días y autobús directo desde la puerta de casa... ¡Ah, no! Esto, desde que soy alcorconera ya va a ser que no... ¡Jopetas!

Pues eso, que pensaré en aprovechar bien las tardes entre hacer cosas para mi casa, disfrutar de la piscina, sudar unas cuantas siestas bien resudás, preparar las vacaciones, visitar terracitas con su consecuente tinto de verano y esas cosas que me mola hacer en verano. ¡Que ya no queda ná!

Y tan feliz, oigan. ^^

*Este año en la Comunidad de Madrid hemos cambiado el revolucionario 2 de Mayo, que caía en domingo, por el beato 3 de Junio, Corpus al parecer... En fin, cosas de los festivos...

domingo, 23 de mayo de 2010

Como la vida misma.

Aviso: Esta historia está basada en un hecho real. Algunas situaciones y diálogos han sido modificados en beneficio de la narrativa y la emotividad del relato. Pero básicamente es lo que pasó. Real como la vida misma.

Entra una chica en una tienda de telefonía móvil (sí, vale, soy yo, pero era por darle un poco de dramatismo a la cosa). Se dirige a la dependienta y le dice: Hola, buenas tardes. Quería un HTC Desire, con el programa de puntos. Nótese que la pronunciación del modelo de teléfono ha sido en un perfecto inglés de Cambridge. De los exámenes de Cambridge que hice hace muchos años, vamos. Disaier, fue más o menos lo que dije. Como en la canción de U2: Disaaaaieer. Qué nombre mejor para el objeto actual de mis deseos... Disaier... Deseo...

Vale, ya vuelvo a la anécdota.

Pues la señora dependienta, muy maja ella, se pone a mirarme los puntos y el precio en el ordenador. Tarda un rato. Miro de reojo a la pantalla y veo que está buscando el modelo de HTC en un menú desplegable. Y va y le dice a su compañera, que estaba allí al lado: Oye, ¿dónde esta la HTC Desiré, que no la encuentro? Y en mi mente se enquista ese nombre. Desiré... Sí, así como suena. Como la Desi que se va a los polígonos los sábados por la noche. Como tantas Desis que hay ahora mismo por el mundo, mayormente en núcleos del extrarradio de grandes ciudades. Desiré. Ni más ni menos.

Termino el intercambio comercial con mi compañía de telefonía móvil, salgo a la calle con mi maravillosa HTC en una bolsa de plástico, me giro a Dani y le digo: ¿HTC DESIRÉ? ¿¿¿DE-SI-RÉ??? Dani, como es lógico, sin entender mi frustración y el patetismo de la situación, me mira con cara de ésta está loca, y dice ¿Qué pasa? Y yo, abrumada por la cruda realidad pienso en voz alta: Desiré, tío. Ha llamado a mi HTC Desiré... (Suspiro) Bueno, la verdad es que es un buen nombre para un móvil comprado en Alcorcón. Ya tengo nombre para mi móvil. Se va a llamar la Desi.

Y Dani, como es un amor, me mira como pensando pobrecica ella, pero no lo dice.

Fin.

Y esta es la historia de cómo el deseo de un sueño se convierte en una realidad alcorconera. Y la realidad sigue siendo igual de buena que el sueño. Me ha pasado con otras cosas también, pero ya las contaré en otro momento :P

sábado, 22 de mayo de 2010

Cosas de R3.

Pues sí, a partir del 20 de Mayo pasé a ser R3. O, un poco mejor explicado, pasé a mi tercer año como psicóloga interna residente. Y esta circunstancia tiene varias consecuencias directas:

1. Tenemos chica nueva en la oficiiiinaaaa... No voy a decir su nombre porque sería de mal gusto, sin que ella los sepa, pero no es Farala, os lo puedo asegurar. Es la nueva R1, mi nueva R pequeña, y parece muy maja, así que me congratula que haya venido al hospi.

2. Ahora soy la R mayor y esto, aunque no lo parezca, me acongoja un poco (por no decir que me acojona). Mucha responsabilidad para una mindundi como yo, que no tiene ni idea de nada...

3. Como consecuencia de lo anterior: ya no tengo R mayor. Esto es lo que peor llevo. Mi R mayor ha sido el mayor apoyo y la mejor compañera que he tenido en estos dos años que llevo de residencia, y me da mucha pena que termine ya. Menos mal que se queda unos meses más trabajando en el centro de salud y no tengo que pasar el duelo todavía, pero cuando se vaya definitivamente me va a dar mucha, pero que mucha pena.

4. Me queda lo mismo de residencia que lo que llevo, día arriba, día abajo. Y, asumiendo que lo bien que estaba el primer año no va a volver, el balance en general no es malo. Sigo aprendiendo muchísimas cosas y sigo dándome cuenta de lo poco que sé. Este año he descubierto que me gusta mucho la consulta con niños, su capacidad de cambio y lo divertido que es trabajar con ellos, pero también es más duro ver a un niño que lo está pasando mal que a un adulto. Supongo que será por esa idea tan enquistada que tengo de que la infancia tiene que ser una época feliz, pero desgraciadamente no siempre es así.

Y bueno, espero que en estos dos años que me quedan siga el aprendizaje, las experiencias nuevas, los buenos ratos y que la cosa mejore un poco más (tengo gran confianza en esto porque me lo dijo una amiga medio bruja).