Último día de campaña electoral (y menos mal).
Y eso que no veo prácticamente la tele pero estoy ya saturada de partidos políticos y sus candidatos prometiendo el oro y el moro, echándose mierda unos a otros y de los coches de propaganda electoral con la música a todo trapo, que me despiertan a la niña de la siesta...
Lo de Esperanza Aguirre siempre ha sido de traca, y daría para un post ella sola, pero presentarse sin programa electoral es como decir "votadme, que ya haré yo lo que me dé la real gana", que por otro lado es muy sincero, porque es lo que suelen hacer la mayoría de políticos, pero me parece de lo más antipolítico y poco democrático. En fins, menos mal que ya no será mi alcaldesa. Seguramente me tocará otra vez David Perez, que es de la misma calaña, pero tiene un pelazo...
El domingo iré a votar, que no se diga que no lo sigo intentando. Nunca me he abstenido en unas elecciones desde que tengo edad para votar y lo seguiré haciendo mientras pueda, porque creo que es la única manera que tenemos de cambiar las cosas (a no ser que les pidamos prestada la guillotina a los franceses, pero no creo que suene la flauta), así que ejerceré mi democrático derecho y me iré a casa a llorar un poco (se puede ver que no estoy muy optimista). Pero por lo menos a partir de las doce de hoy ya no escucharé más gilipolleces.
Ainssss, qué paciencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario