miércoles, 9 de agosto de 2017

Superpoderes de madre.

Anoche la chiquinina se puso mala y vomitó dos veces de madrugada, y gracias a mis superpoderes sólo tuvimos que cambiarle el pijama. Ahí es ná.

Estos poderes de madre que me han permitido semejante hazaña, son el superoído que me permite escuchar cualquier mínimo ruido que haga la peque, el despertar superrápido sin importar en qué fase del sueño esté cuando mi superoído detecta cualquier ruido, y reflejos ninja que me permite coger en brazos a la chiquinina en décimas de segundo. También ayuda que la niña duerme a menos de cincuenta centímetros de mí. Y que lo mismo estoy exagerando un poco, pero no tener que ponerte a cambiar sábanas de la cama y la cuna a las dos de la mañana porque has estado rápida, da un subidón que una se lo tiene que creer un poco XD

¡Y dos veces! (nohasefaltadesirnadamás).

Cualquier madre o padre que haya sufrido una vomitona nocturna entenderá el orgullo y satisfacción.

La niña mejor, por cierto, va tolerando líquidos.

Y la vuelta al curro fataaaaalllrrr... Pero bueno, todavía estoy aterrizando.

No hay comentarios: