Publicidad escandalosa (o mirando para otro lado...).

Con unos (cuantos) días de retraso me entero de esta noticia, la polémica creada por la campaña publicitaria de Toscani contra la anorexia. Y pienso: Vale, es un poco desagradable la foto, pero hay muchas cosas desagradables en este mundo y nos estamos acostumbrando demasiado a mirar hacia otro lado (o poner el grito en el cielo) cada vez que algo hiere nuestra sensibilidad. ¿Dónde está la controversia? ¿Que no es algo estético? Pues claro que no, la extrema delgadez no es algo bonito, en contra de lo que se nos pretende hacer creer a las mujeres de esta generación, y este anuncio lo demuestra perfectamente.

El tema de la anorexia daría para mucho, con una psicóloga de pacotilla como yo, pero no me quiero enrollar demasiado. Me jode mucho la actitud de ciertos sectores de la moda, la publicidad y los medios de comunicación, que echan balones fuera diciendo que la culpa no es sólo suya, que las anoréxicas son enfermas mentales. Tienen razón... en parte. Está demostrado que la presión social a la esbeltez y la estigmatización de la obesidad son factores precipitantes de este trastorno alimentario, así que menos quitarse culpas y más buscar soluciones, capullos. Porque las soluciones que están empezando a aplicar tampoco me valen demasiado.

En el otro lado de la opinión, es decir, los que piensan que toda la culpa es de los medios y la sociedad, están otros sectores que no se cansan de gritar que las modelos son todas una anoréxicas. Esto tampoco me parece justo ni riguroso. Habrá modelos que sí que padezcan un trastorno de la conducta alimentaria, pero hay personas que son muy delgadas porque su constitución es así y no están enfermas. Pueden tener un índice de masa corporal que indique que están en infrapeso, pero comen normalmente, no tienen distorsionada su imagen corporal y y no les aterroriza engordar. Lo que importa es que, desde los medios, el único modelo de belleza que nos ofrecen son chicas de dieciséis años muy (demasiado) delgadas.

La solución, a mi modesto entender, pasa por aceptar que cada una es diferente (hablo en femenino porque este tema nos afecta más a las mujeres), que no todas podemos medir un metro setenta y pesar cincuenta kilos, que para triunfar en esta vida y ser feliz no hace falta ser perfecta físicamente (teniendo en cuenta la perfección que nos imponen), que la belleza no tiene nada que ver con el peso y la figura.

Tendríamos que hacer caso a Tim Burton, que nos instruye con su sabiduría cuando dice eso de "A mí un buen culo así, un culo pa' forrar pelotas, también me pone palote" XD

*Mi recomendación, para el que le interese el tema, es el libro de Rosa María Raich, Anorexia y Bulimia: Trastornos alimentarios. Es un libro muy sencillo, con muchos casos, que explica estos trastornos, sus causas y su tratamiento.

Edito: Hoy es el cumple de Vane y se merece su dedicatoria especial. ¡Felicidades nena! Esta va por ti: