Crisis o "porculeros".
Llevo una temporada de bajón, sobre todo motivado por la oposición, la astenia primaveral, el no encontrar mi sitio y la gente que me rodea (Vane también está fatal, la pobre). Pero he tomado una decisión irrevocable: yo no soy así y no quiero estar así. Voy a pasar de todo. Mi máxima a partir de hoy será me la suda (qué fisna soy). ¿Para qué preocuparse por las cosas cuando la mayoría de las veces no merece la pena? ¿Para qué esforzarse si no hay ninguna diferencia? Me convertiré en una egoísta, sí, pero es por mi salud mental. Ya no aguanto más gilipolleces. Ya no me apetece ser complaciente. ¡¡¡A tomar por culo!!!
Ufff! Qué a gustito que se queda una.
Mañana, para celebrar la entrada del verano (ya he dicho unas cuantas veces que es mi época más favorita del año) me voy a ir todo el día a la piscina y por la noche al conciertazo de Fábula, a ver a Iván, que ya tengo mono.
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