Maldita vuelta (bueno, no tanto).

Heme aquí de nuevo, después de cinco días por tierras galegas, o más concretamente coruñesas. Hacía muchísimos años que no visitaba A Coruña, tantos que ya ni me acordaba de lo bonita que es. Han sido unos días de bastante relax, disfrutando del paradójico buen tiempo (¿veintipico grados en octubre y en Galicia?) que nos permitió meter los pies en el Cantábrico y recorrer la playa de Riazor. Los había más valientes que se estaban bañando, pero yo tengo que reconocer que soy una nenaza. Mucho comer cefalópodos, beber Albariño y Ribeiro, muchos paseos, torre de Hércules, calle Real pa'rriba y pa'bajo, cañas, chocolate con churros, conversaciones y demás cosas que no vienen al caso, porque mis intimidades me las guardo para mí misma. Después de varias jornadas disfrutando de la compañía de Dani 24 horas al día (literal), esta mañana me sentía como si me faltase algo... Sería un friki atacándome por la espalda XD

Ayer me puse un poco al día porque he estado bastante incomunicada. Me dejé el cargador del móvil en casa y he descubierto que soy capaz de vivir sin teléfono, pero con una sensación muy rara. Hoy me han llamado de un nuevo currele y empiezo el jueves. Está bien porque me deja mucho tiempo para estudiar, pero la parte mala es que curro los sábados. Empezaré a acompañar a Vane en su tortura de trabajar fines de semana. El trabajo en sí no es una maravilla: Atención telefónica al cliente, así que después de varios meses... ¡vuelve la telefonista! Seguro que en unas pocas semanas tendré nuevas y apasionantes anécdotas, porque es lo que tiene trabajar en esto, tienes que aguantar a la gente pero algunos te brindan momentos apoteósicos.

Aparte de todo esto, me sorprende lo movidito que ha estado el puente, políticamente hablando. Que si no hay condena del franquismo por los señores Rajoy y Mayor Ojera (estooo... estos cada vez son más de centro ¿no?), que si vamos a honrar la bandera y a este país (espera... no se dice "este país", se dice ¡España!) , que si se estrena la segunda parte del plan Ibarretxe (¿nadie le ha dicho que segundas partes nunca fueron buenas?) y demás porquería que hace que se me revuelva un poco el estómago y que me hace pensar mecagüenlaputadeoros- cómosepuedeserasídesubnormaloygilipollaaaaassssss. Por eso me quedo con este vídeo (a partir del minuto cinco). ¡Los guiñoles se han vuelto chanantes! ¿Ya está metiendo mano Julián por ahí? Aunque me da un poco de grimilla, es un poco blasfemo ver a ese trío emulando a Marlo, Claudio y El Loco de las Coles...

A los originales les dedicaría el Hijo de puta más, pero no merecen el tiempo ni el esfuerzo.

PD: He descubierto un cover de Keep the car running por los Foo Fighters. ¡Sublime!