lunes, 25 de junio de 2012

La semana que viene...

Este fin de semana ha sido mi segunda despedida. La verdad es que la disfruté un montón y estaba mucho más relajada que en la primera (ya me había hecho a la idea de la diadema-polla en la cabeza XD). Las chicas me pasaron a buscar por casa el sábado a media tarde. Habían hecho unas camisetas molonas para todas. En las suyas ponía "Ana en Madrid se casa", y en la mía ponía "¡¡¡Sí, me caso!!! Ana en Madrid", y había un dibujo de playmovil-chica rubia con flequillo y con el pirulí de fondo. Me gustó un montón, todo un detallazo y muy personalizado. También me hicieron una diadema-tocado hecho a mano.

Me tapo un poco :P

Bueno, pues sin saber dónde me llevaban cogimos el metro rumbo a Madrid. Cuando salimos a la Gran Vía no tenía ni idea de donde podíamos ir... Hasta que llegamos a la Chocita del Loro, ¡me llevaba a ver un monólogo! Entonces el misterio era a quién íbamos a ver. Pues no me lo quisieron decir las jodías, así que esperé hasta que Goyo Jiménez salió al escenario. Tenía muchas ganas de verle y no había tenido la oportunidad todavía... y superó mis espectativas, y eso que no nos habló de los americanos... Hubo varios momentos que lloré de la risa. XD

Después de descargar muchas tensiones y un buen chute de endorfinas gracias a las risas, nos fuimos a cenar a un sitio muy chulo en Tribunal. Y después de la cena nos fuimos al Independance, al cual también le tenía muchas ganas, llevábamos meses diciendo que teníamos que ir, y también superó mis espectativas. Me lo pasé genial, la música estupenda, la compañía inmejorable, y mi camiseta con superpoderes hizo que terminásemos hablando con un montón de gente... ¡Hay que repetirlo!

Bueno, eso que lo disfruté un montón y que no hay palabras para agradecérselo a la organizadora de mis dos despedidas, que han sido mucho mejores de lo que nunca me hubiese imaginado... ¡Has dejado el listón altísimo, maja! XD

Ains...

Y hoy he estado terminando de organizar cosas, sobre todo de los centros de mesa, que es lo único que me queda por hacer. Mañana me voy a Conil hasta el viernes, para tomar un poco el sol y no ser "la novia cadáver 2" y para relajarme y olvidarme de las cosas de la boda unos días. La verdad es que no estoy nerviosa, para lo que soy yo, pero sí que estoy con el run-run casi todo el día... A la vuelta la sólo me quedará una semana.

Que por cierto, hoy una amiga me ha dicho "¡Que la semana que viene te casas!" y me ha entrado un poco de hormigueo en la punta de los dedos XD

La semana que viene... Si me lo dicen hace un año, no me lo creo. Tengo unas ganas de que llegue ya...

Y ya, ¡¡¡que me voy a la playa!!!

:)

lunes, 18 de junio de 2012

De los mitos de las bodas (II).

Sigo con los mitos que empecé el otro día.

Los detalles y la personalización son importantes. Esto es cierto, pero sólo me lo parece en parte. Por un lado, me parece que el personalizar tu boda hace que la sientas "más tuya". Cosas como las invitaciones personalizadas, hacer las tarjetas de agradecimiento con un mensaje especial, hacer cosas tú mismo, coordinar colores, detalles que dejen ver tu forma de ser, tus gustos o aficiones pueden hacer más bonita y personal tu boda... Pero hay un peligro grande en esto, que es perderse en los detalles y que los árboles no te dejen ver el bosque. Esto me ocurre mucho viendo páginas que publican fotos de bodas reales. Muchas veces lo único que sale en las fotos son esos detalles, que hacen muy bonito, pero me dejan pensando que las fotos que he visto podrían ser de una boda o de cualquier otro evento. Y eso puede pasar también cuando te encuentras inmersa en la preparación de la boda, y estar tan pendiente de los detalles que te olvidas de que es un día especial, para celebrarlo con la gente que quieres y pasarlo bien, y lo demás es accesorio.

Todo puede estar bajo tu control. Como psicóloga puedo asegurar que nunca puedes tener todo bajo control. Es más, casi todo está fuera de tu control. Como persona bastante obsesiva y controladora, me cuesta creérmelo y tenerlo en mente. El creer que puedes tener casi todo bajo control, si lo sumas a la idea de que los detalles son importantes, puede llevarte a un nivel de angustia muy elevado. Hay muchas cosas que no puedes controlar cuando preparas una boda. Sí, te centras en que todo esté lo mejor posible, pero no puedes controlar el tiempo, por ejemplo, o la conducta de los demás. No puedes controlar cómo se comporten tus familiares y amigos. Pero son así siempre, pretender que se van a comportar exactamente como tú quieres, sólo porque te casas, no es realista.Cuando llegue el día... lo mejor será intentar relajarse y no pensar en cómo te gustaría que saliesen las cosas, sino simplemente intentar disfrutarlas.

Todo tiene que (y va a) salir perfecto. Esto está muy relacionado con lo anterior. Te has esforzado mucho planeando todo, has dedicado mucho tiempo y energía, has pensado y planeado hasta el último detalle. Por lo tanto, todo debería salir bien. Pues no. Te gustaría que todo salga bien, pero el hecho de desearlo va a hacer que suceda. De hecho, como casi todo no está bajo control, es probable que algunas cosas no salgan bien. Que te manches el vestido, que llueva, que alguien se caiga bailando, que a alguien le siente mal el alcohol, que os olvidéis de hacer alguna sorpresa que habías planeado, que tu madre se ponga muy nerviosa, que a alguien no le guste la comida, o el sitio, o el vino, o los camareros... Seguro que algo saldrá mal, pero lo interesante sería no darle más importancia de la que tenga y disfrutar de todo lo que saldrá bien, de estar con tu pareja, familia y amigos y de la fiesta que has organizado para celebrarlo.

Es importante que tus invitados se lleven un buen recuerdo. Hay una cosa que no se debe olvidar mientras preparas una boda: es TU boda. Bueno, tuya y de tu pareja. De nadie más. Todo el mundo puede dar su opinión o consejo, pero eres libre de tomarlo o dejarlo. Porque a veces los demás lo hacen con su mejor intención, pero no se dan cuenta de la presión que pueden llegar a ejercer. Por eso creo que es importante hacer lo que sientas que quieres hacer. Porque es imposible que a todo el mundo le guste todo. Y me parece mejor que uno se sienta cómodo y haciendo lo que es su idea de una boda, a intentar contentar a la mayoría y al final sentir que lo que estás haciendo no es lo que te gustaría haber hecho.

Intentaré seguir con más cositas si tengo tiempo, que como me dicen mucho últimamente... ¡Ya no queda ná! :)

viernes, 15 de junio de 2012

De los mitos de las bodas.

Desde que Dani y yo decidimos casarnos he visitado muchas páginas, blogs y foros dedicados al tema de la boda. Son de mucha ayuda cuando no tienes ni idea de que tienes, puedes y/o quieres hacer. Cualquier cosa que se te ocurra, alguien ya la ha hecho antes y lo ha contado en internet, lo cual facilita mucho la vida, todo hay que decirlo. Pero si te sumerges en exceso en este mundillo puedes llegar a perder la perspectiva y volverte una novia-loca-obsesionada que ha perdido el norte. Yo hago esfuerzos para no volverme eso. De verdad.

Leyendo las experiencias de otra gente, parece que casarse es lo mejor que te puede pasar en la vida, que te embarga un sentimiento de felicidad indescriptible, que todo es fantástico y maravilloso... Cuando lo que yo siento la mayoría de las veces es un poco de agobio por tener que organizar algo tan grande, algo de expectación por no saber cómo saldrá todo, y bastantes ratos de ilusión, no lo voy a negar. Pero no he vivido los últimos meses en una nube, como dicen muchas novias por ahí.

Organizar una boda me parece una de las tareas más difíciles a las que me he enfrentado en mi vida. Involucra a muchas personas, muchos detalles y mucho dinero, por lo que en los últimos meses ha consumido casi todo mi tiempo y mi atención. Y eso que nuestra boda no es demasiado grande ni demasiado complicada. Claro, todo depende de las ganas que tengas de complicarte, y del tiempo y el dinero que quieras invertir en ello. Al fin y al cabo, puedes casarte en el juzgado un martes con un par de testigos y se acabó. Pero eso tampoco era lo que queríamos (aunque debo reconocer que ha habido momentos en que me han dado ganas de mandar todo a la mierda y hacerlo así, a la manera austera-total).

Será que nunca he sido demasiado romántica. O que no entiendo el romanticismo como la mayoría de las mujeres lo entienden. O que le doy más importancia a otras cosas en mi relación que al romanticismo. No sé, prefiero una cena en cualquier sitio con una buena conversación que una cena a la luz de las velas en un restaurante de postín y aburriéndome... Cosas así.

Por eso quería escribir un poco acerca de algunas situaciones, ideas o circunstancias que se explican en blogs y foros, que me han sorprendido porque yo no las he experimentado igual.

Esto es lo mejor que te puede (y que te va a) pasar. O como diría una conocida, "Lo mejor que hemos hecho en la vida ha sido casarnos, ¿verdad, cariño?" o algo parecido, también iba un poco borracha, y a lo mejor era algo como la exaltación de la amistad, pero con el matrimonio... Pues no sé qué decirte. Me siento más orgullosa de haberme sacado el PIR, por ejemplo. Y, emocionalmente hablando, me gustó mucho más irme a vivir con Dani de lo que está siendo el proceso de casarme con él. Que no digo que no sea algo bueno, si no me gustase la idea no lo estaría haciendo, pero de ahí a que sea lo mejor que he hecho... Además, no creo que el hecho de casarnos cambie mucho nuestra relación. Es más, me gustaría que siguiese igual ya que estoy muy contenta así. Aunque el otro día leí algo que me gustó mucho, de una chica, bastante feminista, que siempre había visto el matrimonio como algo contractual, como un acuerdo, como algo que te ata a otra persona. Hasta que encontró la persona adecuada, con la que quiso casarse, y después descubrió que el matrimonio para ella había significado una base segura sobre la que hacer muchos proyectos a medio y largo plazo. Me gustó esa idea.


El vestido tiene que ser TU vestido. Esto lo he leído repetidamente: "me probé nosécuantosmil vestidos y cuando me puse ése, supe que era MI vestido." Que si te embarga una felicidad absoluta, que si parece que te ha tocado el espíritu santo, que si te sientes transportada al éxtasis... Y ya no hay ninguna duda más, es ÉSE. Pues mira, yo me probé unos cuantos vestidos y elegí el que más me gustaba, estaba dentro de presupuesto y me quedaba bien. Y ya. Me sentí bien cuando lo encontré porque buscar vestido de novia para mí fue una actividad bastante estresante y sentí alivio cuando al fin terminé de buscar, pero de ahí al éxtasis va un trecho grande. Luego hay chicas que después de comprarlo a veces no se sienten seguras de si han elegido bien y lo viven como un auténtico drama, porque claro, las demás parecen tan felices y seguras, que si ellas dudan será porque algo va mal. Pues no, será que eres humana y dudas como todo el mundo, digo yo...

Hay más, que seguiré escribiendo en otro post. Esto me parece suficiente parrafada por hoy.

miércoles, 13 de junio de 2012

Hazlo tú mismo (II).

Otra cosa que finalmente me he decidido hacer es el porta alianzas. En la joyería nos dieron una cajita de plástico bastante cutre, así que quería buscar algo para llevar los anillos. No quería gastarme dinero, porque es algo que no voy a volver a utilizar, y tampoco encontraba nada que me gustase especialmente en las tiendas de cosas de bodas tradicionales, sólo cojines y cestitas llenas de raso y puntillas. ¿Sabéis cuales? ¿No?

Así:

¡¡¡AAAAAAAAAHHHRRGGGGG!!!
Que habrá a quién le guste, no digo que no, sobre gustos no hay nada escrito, pero este es mi blog y escribo sobre lo que me gusta a mí, leñes.

Pero también hay otras cosas, afortunadamente. Si tienes maña con la costura puedes bordar un bastidor. O comprarlo si te gusta mucho y no tienes maña.

Bastidores de La tienda de Arorua.


Otra cosa que me ha parecido sencilla de hacer es un porta alianzas con un libro antiguo y bonito.


Foto de Mary Kate McKenna Photography

Foto de A Little Bit of Whimsy Photography
Visto en Once Wed
O comprar una cajita de madera y decorarla a tu gusto.

Caja vista en Etsy, en braggingbags.
O, para apasionados de las manualidades, hacer un platillo con un mensaje especial. O comprarlo, claro.

Un sencillo platito de Paloma's Nest

Pues eso, que para gustos los colores. Y al final nos hemos me he decidido por la cajita, que es lo más fácil y últimamente estoy minimizando esfuerzos.

lunes, 11 de junio de 2012

Hazlo tú mismo.

O el moderno DIY, que se dice ahora, del inglés Do it yourself. La verdad es que hay gente que hace muchas cosas para su boda, desde las invitaciones hasta a algunas con mucha maña o costureras que se hacen el vestido, pasando por los detalles de los invitados, tarjetas de agradecimiento, arroz de colores, alfileres o broches, el libro de firmas y cualquier cosa que se pueda ocurrir. Todo es cuestión de tener tiempo y ganas.

Y es que viendo los precios de cualquier cosa relacionada con bodas, dan ganas de hacer las cosas una misma, por no pagar a la gente que intenta aprovecharse de ello. Me da mucha rabia que cualquier cosa que busque para la boda el precio se multiplique por tres. Pero bueno, la falta de tiempo y la comodidad también tiran mucho.

Lo último han sido los centros de mesa. En nuestro caso, al ser un cóctel sólo va a haber tres mesas y bastantes sillas para que la gente mayor se pueda sentar, pero me apetecía poner algunas flores bonitas o algo así en las mesas que van a poner. Y mirando centros de mesa de flores, de 70-80 euros no bajaba nada... Cuando un ramo de flores normal puede costar 20-30 euros. Y además todos demasiado historiados para lo que yo quiero. ¡Qué rabia!

Así que, como ahora estoy parada, he decidido buscar algo sencillo para hacer yo. Alguna cosa como estas:

Unos jarrones de cristal, unas cintas para decorarlos y paniculata.





Como la cosa va también de amarillo, unos limones en jarrones de cristal.





 
Este me encanta, con la vela flotante.


O con flores amarillas, baratas y que aguanten, como las gerberas.






¿Y de craspedia?


O calas...




A ver con qué me animo finalmente :)

miércoles, 6 de junio de 2012

Alcorconera y parada...

Hoy he estado de gestiones. La primera ha sido empadronarme en el pueblo, que después de dos años viviendo aquí, creo que ya era hora. También lo he hecho porque tenía que hacer los papeles del paro y no me apetecía irme hasta mi barrio cada tres meses... Así que, después de empadronarme y de empadronar a Dani en el piso, cosa que ha tardado como 10 minutos sorprendentemente, me he dirigido a realizar la actividad más popular para los españoles en los últimos tiempos: visitar la oficina del INEM.

Creía que iba a ser más infernal, pero realmente sólo he estado una media hora. Eso sí, para hacer los trámites de la prestación hasta el martes que viene no me han dado cita... Pero bueno, ya soy parte de esa gran familia que cada vez acojona más de lo grande que es: los parados.

Luego, como tenía tiempo, he ido a cambiar mi tarjeta sanitaria para no tener que ir al médico hasta mi barrio.

Así que ya está, parada y alcorconera, hasta que encuentre curro y/o convenza a Dani para mudarnos a Madrid. Y no sé que veo más difícil de las dos opciones.

Bueno, un poco de musicote para alegrar el día :)

Una maravilla que he encontrado por ahí, de Supersubmarina.



Qué ganas de volver a verles en directo.

lunes, 4 de junio de 2012

Un poco más del Carmona.

Para momentos de aburrimiento, nada mejor que unas buenas carcajadas.




También una canción dedicada especialmente a mí. Ainssss... Bueeeeno, vale, que no es pa' mí, que es pa' otra Ana, pero a mi sí me conquistaban cantándomela XD




Me estoy planteando volver a ver La Hora Chanante, que tan buenos momentos me trajo la última vez que estuve parada :)

sábado, 2 de junio de 2012

Una boda real (aunque no lo parezca).

No pensaba hacer esto de poner fotos de una boda en mi blog, pero ésta me ha hecho emocionarme. Me gusta todo: la decoración sencilla, el ramo de peonías, el novio como un pincel, el peinado y el maquillaje, el vestido sencillo-pero-princesil de la novia... Pero lo que más me ha gustado de todo es la alegría que transmiten todas las fotos, esas sonrisas de la novia, me han emocionado. Espero sentirme así en la mía :)












La boda la he visto en Style me Pretty (aquí entera), y las fotos son de Abby Jiu.