VergÜEnza.
Llegará un momento, dentro de 20, 30 o 50 años, en que la siguiente generación nos juzgará. Como nosotros juzgamos a los alemanes que miraban para otro lado mientras el nazismo mataba judíos, negros, gitanos y homosexuales con impunidad. Como nosotros juzgamos a los sudafricanos que permitieron el apartheid. Como juzgamos a los responsables del genocidio en Ruanda en los noventa. Como juzgamos el gueto de Varsovia o la masacre de Srebrenica.
Nuestros hijos nos mirarán y se preguntarán cómo permitimos que ocurriera algo así, tan cerca, si somos buenas personas. Por qué sólo nos indignamos un poco con la foto de un niño (casi bebé) muerto en una playa, y luego ya nos desensibilizamos para el resto de horrores que llegaron después. Para qué tanta era de la información, si no hacíamos nada con ella.
Y ante esa mirada sólo cabrá sentir vergüenza. La misma vergüenza, rabia e impotencia que me produce ahora.
PD. Esta entrada la escribí ayer, y hoy... más rabia, más impotencia, más miedo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario