miércoles, 26 de octubre de 2016

Viaje en coche por Escocia (VII). La isla de Skye.

Ese día vamos a seguir recorriendo la isla de Skye, pero esta vez la parte Oeste. En el hotel tenemos desayuno incluido, así que nos vestimos y bajamos al comedor, pero hay tanta gente desayunando que tenemos que esperar unos minutos para que nos den una mesa. Nos ponen café y tostadas y nos toman nota de lo que queremos caliente. Yo tomo huevo frito con bacon y champiñones, y Dani huevo cocido con bacon. Para Sofía cogemos jamón york, queso y tostadas. Cuando terminamos, recogemos las maletas y hacemos check out, que como ya está pagado solo es dejar la llave. Cogemos el coche (sigo conduciendo yo ese día) y vamos hacia Dunvegan. Sofía se duerme por el camino, pero hacemos un par de paradas para hacer fotos. Hace un día buenísimo, con sol radiante, y esa parte de la isla tiene unos paisajes preciosos. Cuando llegamos al castillo la chiquinina sigue dormida, así que decidimos seguir a Neist Point y ver el castillo a la vuelta. Para llegar a Neist Point la carretera es casi toda de un sólo carril con passing places, y hay bastante tráfico. Resulta un poco estresante porque hay que ir pendiente de si viene alguien de frente, si tienes alguien detrás que quiera pasar, buscar los sitios donde la carretera es más ancha... En un sitio cerca de Neist Point casi nos damos de bruces con un minibus, que encima no colaboró mucho para cruzarnos con él. Grrrrrrr... En total desde Kyleakin a Neist Point son más de cincuenta millas y tardamos casi dos horas, con la paradas para fotos. La peque se despierta poco antes de llegar y ya llegando al faro dejamos el coche al borde de la carretera, porque hay un montón de coches aparcados. Debe ser hora punta. Damos una vuelta, hacemos fotos y le damos un yogur a la chiquinina, que tiene un poco de hambre. Como el camino es bastante escarpado, no nos atrevemos a bajar con la peque en la mochila, así que nos conformamos con las vistas desde allí.

Paisajes en Skye. 
Paisajes en Skye. 
Acantilados cerca de Neist Point. 
Neist Point. 
Neist Point. 
Volvemos hacia Dunvegan por la carreteruja infernal de los passing places. Son sólo once millas, pero tardamos en llegar media hora. En Dunvegan es ya la hora de comer, y entramos en el primer sitio que vemos. Se llama Old School y vaya suerte hemos tenido porque nos encanta. La comida está riquísima, son muy amables y es muy family friendly: tienen trona, cubiertos y vasos para peques y platos especiales para niños. Comemos muy bien, yo un hot bun de beef con salsa barbacoa (como un bocadillo de carne asada en pan de hamburguesa), Dani un solomillo y la peque salchichas con patatas y judías con tomate. De postre tomamos un mousse de chocolate con nata montada (que se nota que es nata de verdad) que está de morir. A Dani le gusta tanto que deja tres libras de propina.

Vamos a ver el castillo, que está muy cerca del restaurante, pero decidimos pagar solo para ver los jardines por si se nos echa la hora encima, ya que tenemos que estar en Armadale antes de las seis. Nos cuesta 10£ la entrada y la visita está bastante bien. A Dani le mola mucho que el castillo sea del clan McLeod. Friki! XD

De los McLeod de toda la vida :P
Castillo de Dunvegan. 
Entrada al castillo. 
Ponemos rumbo a Armadale porque a las seis y media hay que estar para coger el ferry a Mallaig. Sofía se vuelve a echar otra siesta de camino. Son otras 55 millas y otra hora y media de viaje. Llegamos bastante pronto, como a las seis, y mientras la peque sigue durmiendo, Dani va a por los tickets. Compramos los billetes cuando preparamos el viaje porque queríamos ir en el último viaje del día, pero no quería que nos quedásemos en tierra. En la página web de CalMac se pueden comprar con antelación. Cuando llegas al puerto hay que dejar el coche en una de las filas, detrás del último coche que haya llegado. Vas a por los tickets y esperas a que llegue el ferry. Cuando llega el ferry, te montas en el coche y los empleados te dicen donde lo dejas dentro del ferry. Ya en el ferry te puedes ir a sentar en la cubierta y disfrutar de las vistas. La peque disfruta del paseo en el ferry, diciendo aba aba y pepé todo el rato, señalando al mar y a las gaviotas.

Vistas desde el ferry.
Llegamos a Mallaig a las ocho menos veinte y buscamos el hotel. Es el West Highland, nos cuesta 105£, sólo alojamiento, tiene parking y se supone que wifi gratis en la habitación, pero no nos llega señal. El hotel está bien, comparado con el de Kyleakin cualquier cosa nos hubiera encantado, también ayuda que las vistas desde la habitación son preciosas. Cenamos en el pub del hotel porque el restaurante está lleno y nos da pereza movernos. Dani toma una hamburguesa y yo unos mejillones en salsa, bastante rico todo. La cama es bastante mala, el colchón se hunde por mi lado, así que no descanso muy bien, aunque por lo menos la chiquinina aguanta en la cuna casi toda la noche.

Vistas desde la habitación.
La habitación del hotel. 

No hay comentarios: