domingo, 31 de mayo de 2020

Mayo de nueva normalidad

Pues ya se nos ha pasado mayo también, sin enterarnos mucho de cómo ni por qué. Hemos ido recuperando un poco algunas cosas que nos estaban haciendo mucha falta, como los paseos para la chiquinina, o el poder ver a la familia y amigos. La chiquinina está aprendiendo a patinar a pasos agigantados, yo estoy intentando salir a caminar/trotar y Dani está a tope con sus miniaturas. Esta última semana hemos podido salir por fin los tres juntos a pasear. Me he comprado un robot de cocina, estamos a tope con la fruta de verano ya y hemos aprovechado que llevan semanas sin cortar la maleza para recolectar flores silvestres. También ha llegado uno de mis momentos favoritos del año: sacar la ropa de verano. Por fin soy feliz en alpargatas y pantalones cortos. Y, como lo de ir a la piscina no entra en nuestros planes a corto plazo, un día de mucho calor sacamos el barreño a la terraza y nos remojamos un poco. Otra novedad es que estoy intentando sacar tiempo para estudiar la OPE y, sorprendentemente consigo concentrarme bastante los ratos que estoy en ello. A ver si me dura.


Apuntes de la OPE, juegos de mesa y la Mambo.
Nueva normalidad, flores silvestres y San Isidro. 
Sandía, baños en barreño y reencuentros. 

Pues eso, que poco a poco anima ir viendo avances y poder ir retomando algunas cosas de nuestra vida anterior. Todavía se ve muy lejos el que volvamos a estar como hace tres meses, e incluso es posible que no lo volvamos a ver en mucho, pero que mucho tiempo, así que habrá que ir sacando lo que podamos de bueno de estos tiempos interesantes que nos ha tocado vivir. 

martes, 26 de mayo de 2020

Expresiones que mi hija no sabrá de donde vienen.

Es curioso, pero tener hijos te hace plantearte cosas del presente, pasado y futuro, que pueden ser una moñada, pero si no los tuvieras yo creo que ni lo pensarías. Siempre había visto el salto generacional como algo hacia la generación de mis padres, no como algo hacia los más jóvenes, pero en los últimos años lo empecé a sentir también de esa manera, sobre todo a raíz de trabajar con adolescentes y darme cuenta de que no tienen conciencia del mundo con las Torres Gemelas, por ejemplo, porque tenían menos de tres años cuando cayeron, si es que habían nacido. O que te dicen que Fito y Fitipaldis es lo que escucha su madre, cuando también es lo que escucha MI padre, pero antes lo escuchaba YO. O que no saben quién es Sandra Bullock. En fin cosas que te hacen sentir viejoven.


Aquí van unas pocas cosas que creo que la chiquinina no entenderá de dónde vienen, a no ser que se las expliquemos, claro.

Tirar de la cadena. En la antigua casa de mi abuela sí que había un inodoro con la cisterna cerca del techo y la cadena para vaciarla. Ahora casi siempre le damos a un botón o accionamos una palanca.
 


Colgar y descolgar el teléfono. Cuando los teléfonos eran así, como en la foto, el auricular estaba colgando y literalmente se descolgaba para poder hablar.



El símbolo de guardar. Es un disquete. Donde en los ochenta se guardaban los juegos, programas y documentos del ordenador. Y luego fueron los CDs, los DVDs, los pinchos USB y los discos duros externos. Y en el futuro será la nube, probablemente. Pero el símbolo ya es universal y atemporal.


Poner un disco, rebobinar una película. Porque en nuestro día a día seguimos diciendo PON ese disco o rebobina la película (aunque también está muy extendido el "dale para atrás"), que son expresiones que vienen del formato físico. El disco había que ponerlo físicamente en un lector adecuado para poder escucharlo. El chiste del compact disc de Mozart en la caja de galletas creo que también es algo bastante incomprensible para los más jóvenes. O lo de la siguiente foto, como dicen algunos memes, es para millenials o boomers.



Encender el fuego. Conozco pocas casas donde aún se utilice cocina de gas, en la mayoría de las casas tenemos vitrocerámica, pero seguimos encendiendo el fuego cuando encendemos la vitro. Otra expresión que seguramente se quedará anacrónica. 



Revelar fotos. Aunque lo que hagamos realmente sea imprimir las fotos, y el revelado (o la edición) se digital, muchos cuando pasamos las fotos a papel seguimos diciendo que revelamos las fotos, cosa que ya sólo hacen unos pocos que siguen usando fotografía analógica. Tampoco creo que sepan por qué se llamaba carrete al álbum de fotos en el iPhone. Y seguramente los jóvenes tampoco tengan mucha idea de qué es lo que sale en la foto. 



Bueno, y hasta aquí ha llegado mi profunda reflexión del día. 

Bonus: Esta expresión no es exactamente igual que las otras, de hecho es casi carca hasta para mí (y eso que decir carca ya es carca), pero me hizo gracia hace unas semanas cuando descubrí que decir tengo 38 tacos, cuando te refieres a los años que tienes, viene de los calendario de taco que había antes en las casas. Yo recuerdo el que había en casa de mi abuela, como éste: 



Y ya. 

viernes, 22 de mayo de 2020

Más canales entretenidos en Youtube.

En esta entrada recopilé hace unos meses algunos canales de Youtube que había empezado a seguir y que me parecían entretenidos e interesantes. Hoy os traigo otra ración de canales que me gustan, me enseñan y entretienen a partes iguales. 


A raíz de buscar información sobre la Mambo de Cecotec, que al final me he acabado comprando, llegué al canal de Anaïs, Bake or Die. Es un canal con muchas recetas, no sólo con el robot de cocina, y algunas cosas de su vida diaria. Me gustan sus vídeos de meal prep, o cómo organiza las comidas de la semana, y cómo da ideas para introducir verduras y legumbres para los que no les gusta. Aunque lo que más me gusta es que ella es muy maja y natural. 


Bueno, no recuerdo cómo llegamos al canal de James Blick, un neozelandes que vive en Madrid arrejuntado con una española, Spain Revealed. Lo que sí sé es que me hace mucha gracia ver cómo se ha mimetizado con nuestra cultura y, sobre todo, con nuestra forma de comer y beber. Me encantan sus vídeos recomendando sitios para tapear en el centro de Madrid, ya tengo unos cuantos apuntados para cuando el estado de alarma pase. Y todo eso, practicando inglés :P 


No suelo ver, leer, consumir mucho sobre psicología en mi tiempo libre (aparte de los libros de Oliver Sacks), pero a través de Instagram llegué a conocer a Alberto Soler y su canal Píldoras de Psicología. Me gusta su forma de divulgar contenidos sobre crianza, aunque le da a todos los palos. En general me parece un buen divulgador, que explica cosas de psicología con rigor científico, que en nuestro campo no es poco.



Hace poco que he descubierto los canales de Javier Santaolalla, un físico y divulgador responsable de los canales Date un Vlog y Date un Voltio, entre otros. Pues eso, física y ciencia de forma inteligible para los comunes mortales :P



Buscando en Youtube cosas de viajes llegué al canal de Alanxelmundo. Bueno, de hecho creo que fue por un vídeo del Wizarding World of Harry Potter en Orlando, otra necesidad que me he creado. Pero bueno, frikadas aparte, este canal de chifla. Tiene millones de sucriptores y es por algo: sus vídeos son una maravilla. Es como tener guías de viajes de un montón de sitios en formato audiovisual, y muy entretenidas. Repito, una maravilla.



Y dos extras:

Ayer descubrí este vídeo que presenta Harry Potter como si fuera Friends. OH-DIOS-MÍOOO



Y de vez en cuando veo vídeos de Tucker, un perro subtitulado (en inglés) que me hace mucha gracia.



Ale, y ya vamos servidos por hoy :)

lunes, 18 de mayo de 2020

Ejercicios de respiración (para relajarte o dormir).

Parece mentira que haya retomado el escribir sobre mi trabajo después de tantos años, pero creo que la situación lo merece, sobre todo si le sirve a alguien para aliviar parte de la ansiedad que se puede sentir en estas circunstancias.


Aquí conté algunos trucos que pueden ayudar en el día a día, y aquí algunos recursos de ayuda más profesionales. Hoy traigo ejercicios de respiración o meditación que pueden servir cuando nos encontramos angustiados o cuando nos cuesta conciliar el sueño. Todos estos ejercicios y sus variantes tienen como objetivo el centrar la atención en el aquí y ahora, intentando que nuestros pensamientos nos se vayan hacia el futuro o el pasado, y que la respiración se haga más lenta y profunda, lo que activa el sistema nervioso parasimpático y las sensaciones de relajación y calma a nivel vegetativo.

Os propongo probar estos dos ejercicios:

Respiración 4-7-8

Vamos a inhalar siempre por la nariz y exhalar por la nariz o la boca según nos resulte más cómodo. Podemos hacer este ejercicio en cualquier situación, pero es más fácil lograr una respiración abdominal o profunda cuando no tenemos mucha práctica si estamos tumbados o reclinados. Inhalamos contando hasta 4, retenemos el aire en los pulmones contando hasta 7 y exhalamos despacio contando hasta 8. Repetimos tantas veces como necesitemos hasta sentirnos más tranquilos. Si nos sentimos mareados al hacer este ejercicio, habría que intentar hacer las inspiraciones y espiraciones más lentas, porque puede que estemos hiperventilando. 

Atención en la respiración 

Con este ejercicio podemos centrar nuestra atención en la respiración durante diez minutos y resulta de mucha ayuda si no estamos acostumbrados a hacerlo. Es como contar ovejitas, pero centrándose en la respiración, por lo que puede ser de ayuda cuando nos cuesta coger el sueño. Al principio vamos a contar mentalmente las inspiraciones y las espiraciones, siempre las hacemos por la nariz y a un ritmo normal y cómodo, no es necesario forzar una respiración profunda. Inhalamos y cuando exhalamos nos decimos 50, al inhalar nos decimos 49, al exhalar nos decimos 48, al inhalar nos decimos 47, al exhalar nos decimos 46... Seguimos así hasta el 0. 

Si aún no hemos conciliado el sueño, vamos a continuar sólo contando las exhalaciones desde 50 otra vez: cogemos aire despacio y al exhalar nos decimos 50, cogemos aire despacio y al exhalar nos decimos 49, cogemos aire despacio y al exhalar nos decimos 48... Y así hasta el 0. 

Si aún no hemos conciliado el sueño continuamos respirando fijándonos en el ritmo de la respiración, en cómo el aire entra y sale por nuestra nariz, en cómo cambia de temperatura al inhalar y al exhalar, en cómo lo notamos en la garganta, como se mueve nuestra caja torácica, nuestras costillas, nuestro abdomen...

Con estos ejercicios el objetivo no es evitar las emociones negativas, sino aprender a regularlas, a que no se hagan tan intensas que nos acaben condicionando, dejar de hacer determinadas cosas que intensifican la emoción (normalmente darle vueltas y quedarnos enganchados en pensamientos negativos o que nos generan ansiedad). En definitiva, a aprender a convivir con ellas.

Ánimo y serenidad.