País Vasco francés, las Landas y Burdeos (VI).
La última entrada del viaje para contar la visita a St Emilion y la vuelta a casa.
El viernes la idea era visitar algunos pueblos cercanos a Burdeos, pero no nos dio para mucho, sobre todo porque Dani seguía malo y un poco flojillo. Aunque lo importante, que era ver Saint-Emilion, le dedicamos toda la mañana. Después de desayunar y prepararnos, cogemos el coche y ponemos rumbo a Saint-Emilion, que está a 50 kilómetros y tardamos casi una hora en llegar. Dejamos el coche a la entrada del pueblo, en la zona baja. La chiquinina se ha quedado dormida y esperamos un rato a que se despierte. Cuando termina su siesta, vamos a dar un paseo por el pueblo.
Saint-Emilion es patrimonio de la humanidad, y está bien conservado. Es famoso por sus vinos y por la iglesia rupestre, que está excavada en unas cuevas. Merece la pena pasear con tranquilidad, aunque no es muy grande pero tiene sus buenas cuestas.
Viñedos a las afueras de Saint-Emilion |
La tour du Roy |
Vistas de Saint-Emilion |
La iglesia rupestre |
Cuesta en Saint-Emilion |
Calle en Saint-Emilion |
También hay muchas escaleras |
Saint-Emilion |
Petit Fontaine |
En el hotel descansamos un rato y bajamos a cenar justo al lado, en la misma acerca, en un sitio que nos sentamos a tomar un vino en la terraza, nos gusta (y nos da pereza movernos), así que decidimos quedarnos. Se llama La P'tite Brasserie y el camarero es muy majo. No tienen carta, te explican los platos del día y decides. Tienen platos para niños, y para Sofía pedimos nuggets de pollo que resultó ser dos filetes de pechuga de pollo empanada con patatas. Mucho mejor. Nosotros cenamos hamburguesas que estaban muy buenas. Con un par de cervezas y un par de vinos, nos cuesta unos 60€ la cena. Nos vamos a dormir pronto porque tenemos mucho kilómetros por delante el sábado.
El sábado desayunamos también en el hotel, cargamos el coche y hacemos checkout. Cuando salimos son las diez y pico. Hace buen día y da rabia pasar por las Landas con lo que nos llovió el día que estuvimos por allí. Desde Burdeos a la frontera son poco más de 200 kilómetros y tardamos algo más de dos horas. En ese rato cada pocos kilómetros hay un peaje, pasamos por tres 3,60€ y uno de 2,40€, y en la frontera pagamos 1,70€. Ya en Guipúzcoa pagamos el de la AP1 que con 13€. Paramos antes de llegar a Miranda, a echar gasolina y comemos un bocadillo (Comida 10€ y gasoil 50€). Después a la altura de Burgos pagamos otro peaje de 12€. Al final llegamos a casa a las seis y pico, sin hacer más paradas, y sin casi tráfico en todo el camino. Yo pensaba que iba a ser más paliza, pero la vuelta no ha ido nada mal.
En total hemos hecho unos 1900 kilómetros en ocho días, y nos hemos gastado unos 1500€. Viajar en coche con la chiquinina está resultando muy cómodo, después de esta experiencia y la de Escocia, podemos decir que nos estamos volviendo expertos en road trips familiares. También ha sido un poco accidentado por los virus de la peque, que luego se cogió Dani, y los días en el País Vasco francés y las Landas nos hizo bastante mal tiempo, pero a mí me ha gustado mucho. Burdeos es impresionante, la gente del sur de Francia muy maja, la comida y el vino estupendos, los paisajes son espectaculares y la verdad es que tengo ganas de volver pronto, a ver el valle del Dordoña, la ruta de los Cátaros o la Costa Azul y la Provenza. En fin, todo se andará.
Otras entradas del viaje en coche al País Vasco francés, las Landas y Burdeos:
Preparación y ruta
Viaje de ida y San Sebastián
País Vasco francés
Las Landas
Burdeos
Saint-Emilion y vuelta a casa.
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