jueves, 29 de abril de 2010

De novedades domésticas.

Uf, vaya semanita que llevo. No he parado en casa desde el viernes pasado. Qué curiosas son las cosas que ocurren: de repente un jueves llamas para ir a ver otro piso más y crees que vas a añadirlo a la lista de docenas de cutre-pisos que ya has visto, y como por arte de magia el domingo has firmado un contrato de alquiler y ya tienes tu nuevo hogar.

Pues sí, pues sí. Así como lo oyen. Lo puedo decir más alto, pero no más claro:

¡¡¡Que me he independizaooooooo!!!

Bueno, todavía estoy en proceso, porque el pisito está sin amueblar y esta semana he sido la mejor amiga de Ikea (y de Isa, que a este paso me va a amueblar la casa entera). Pero en ello estamos. Así, de un día para otro, ha sucedido lo que llevo dos años deseando, y estoy que no quepo en mí de gozo, emocionadísima, ilusionadísima, conmovidísima, Y alucinadísima y muchos otros adjetivos que acaban en ísima. Qué subidón más guapo, ni las drogaínas, oigan.

Pues eso, que ya iré contando cómo es esta nueva aventura de convivir con mi novio y tener que llevar una casa. A mí me parece un reto apasionante. Lo mismo luego me estampo de narices contra la cruda realidad XD

Y ya, que no es poco.

3 comentarios:

Quico dijo...

Oyes, la ana! Enhorabuena! Si ejque al final todo llega, lo bueno también!

A estas edades nuestras, este tipo de cosas dan un subidón del copón!

Congratulations one more time!

Ana dijo...

¡Muchas gracias, Quico! Estoy con una euforia que no me cabe en el cuerpo ^^

¡Taluego!

Neri dijo...

Me alegro mogollón ^^ Tengo ganas de leer la entrada del día que te sientes en tu sofá, mires tu casa y digas "yasta, todo puesto, este es mi hogar" ^^

Millones de besos dulces ^^