lunes, 3 de agosto de 2015

Cuatro meses.

Ufff... De verdad que cada vez se me pasan más rápido los meses. Tenía pensado escribir cada mes el primer año de la chiquinina, pero me estoy planteando si me va a dar tiempo. Bueno, voy a lo importante.

La peque hace ya cuatro meses y cada día está más cambiada. Este mes ha conseguido darse la vuelta, de boca arriba a boca abajo. Levanta la cabeza y se queda apoyada en el pecho cuando está boca abajo. Ha empezado a coger cosas cuando se las ofrecemos, aunque la coordinación mano-boca aún le cuesta. Cada día aguanta más la cabeza cuando la tenemos cogida y le gusta más estar de cara al mundo (aunque sólo a ratitos, que todavía es muy pequeña).

Se nota que ya ve estupendamente, porque nos sigue por la habitación con la vista. De paseo en el carro flipa cuando hay árboles y se enfada cuando no hay nada para mirar, como todavía tiene que ir tumbada... En la mochila ya saca la cabeza por arriba (su tío Alex dice que parece una tortuguita, jijiji) y se estira mucho para poder ir viéndolo todo. Cuando se aburre, apoya la cabeza en mi pecho y se echa una siestecita. También se nota que oye perfectamente porque se sobresalta al mínimo ruido. Es bastante asustadiza y con los ruidos pega unos brincos la pobre que pa' qué. Se asusta hasta cuando Dani tose o estornuda...

Como ha aprendido a darse la vuelta, también ha empezado a hacerlo por la noche, y parece que le gusta mucho dormir boca abajo. Sé que dormir boca abajo es un factor de riesgo para el SMSL, pero la primera noche que lo hizo pasamos las dos una noche horrible, ella dándose la vuelta cada cinco minutos y yo volviéndola a poner boca arriba y sin dormir bien ninguna de las dos. Luego leí un poco por Internet y pensé que si ya es capaz de darse la vuelta y subir la cabeza, no se va a asfixiar por dormir boca abajo. También he leído que no es lo mismo el SMSL que la asfixia, aunque durante mucho tiempo han estado metidos en el mismo cajón. Así que ahora lo que hago es acostarla boca arriba y dejarla dormir como esté más cómoda, y si se da la vuelta sola, la dejo dormir como ella elija.

La lactancia este mes ha sido muy fácil para mi. Sigue pidiendo cada poco tiempo, cada dos, o como mucho, tres horas durante el día. Pero por las noches el primer rato de sueño lo ha alargado bastante, algunos días aguanta cinco o seis horas, no muchos. Eso sí, a partir de ahí otra vez cada dos o tres horas. Pero aún así, el no tener que preocuparme de llevar la comida, tener que esterilizar, etc, es genial. Llevar la comida y bebida encima, siempre lista y en su punto, sin tener que hacer nada más que buscar un sitio donde sentarme, no tiene precio. Además, este mes no he tenido ningún problema de enganche, ni mastitis, ni perlas de leche, ni ná. El único susto fue una noche, que se me piró la pinza y le di dos tomas del mismo pecho y me desperté a las cuatro de la mañana con el otro pecho enorme y duro como una piedra. Pero puse a la niña a comer en ese momento (que estaba la pobre dormida) y me vació genial y siguió durmiendo como una bendita.

También la noto más tranquila, y va aceptando mejor que la cojan otras personas, sobre todo su padre, con el que ya se duerme algunas veces. Llora menos, y sólo algunos días monta pequeño berrinche por la tarde-noche si está muy cansada. Es una parlanchina y cuando está contenta no para de golpear, dar patadas, hacer ajos y pegar grititos. Su juego favorito ahora es mirarse las manos y después chuparlas como si no hubiera un mañana. También le gusta bastante que le cante. El chupe sigue sin gustarle mucho, pero el pulgar le encanta, cagüentóloquesemeneaaa... Los abuelos le ha comprado una Jirafa Sophie, a ver si le da por chupetearla y deja en paz el dedo.

En fin, que cada día que pasa está más guapa y divertida. Nos pone las cosas bastante fáciles, aunque hay momentos de desesperación, claro, pero cada vez son menos. El jueves vamos a la revisión de los cuatro meses, a ver qué nos cuentan del peso (obsesióndemadrelactante TM) y le tienen que poner las vacunas a la pobre. La otra vez no lo pasamos muy mal, a ver cómo nos va ésta.

No hay comentarios: