viernes, 11 de mayo de 2018

En busca de... LA CASA.

Iba a poner "En busca del Arca Perdida", pero al final no fue tanta odisea como pensaba. La búsqueda de nuestra nueva casa nos llevó un par de meses o tres. Vimos entre quince y veinte pisos, no recuerdo muy bien exactamente cuantos. Comparándolo con el tiempo que llevamos esperando desde que encontramos el piso hasta ahora se me antoja poco tiempo.

Lo primero que deberíamos haber hecho es mirar cómo estaban los precios, porque si te marcas un presupuesto sin mirar antes, lo mismo luego te llevas un chasco, como nos pasó a nosostros. Después de los primeros días mirando pisos por internet y viendo que por el precio que habíamos pensado sólo encontrábamos antros o en zonas no muy recomendables, decidimos flexibilizar un poco el presupuesto inicial.

Otras cosas que me hubiera gustado saber antes de empezar a buscar piso: La mayoría de las inmobiliarias son unos piratas y cobran comisiones tanto al comprador como al vendedor. Si un anuncio era de una inmobiliaria de este tipo (rollo corbatas rojas o verdes) lo descartábamos casi automáticamente. Sólo vimos un par de pisos con agencias de este tipo y, seguramente, si no tuvieran comisiones para el comprador, algún piso podríamos haber comprado con ellos. Los anuncios manuscritos que encuentras por la calle o en los buzones no tienen por qué ser de particulares. De hecho en nuestra zona una inmobiliaria usa este sistema con bastante frecuencia. Si un anuncio no tiene fotos del interior de la casa y sólo hay fotos de los alrededores, el portal, etc, malo. Muy malo. Si dice que el piso tiene posibilidades es que está para tirarlo. Hay gente que hace fotos muy buenas de los pisos, y otros que las hacen muy malas, siempre es buena opción no descartar o enamorarse por las fotos.

En fin, nos podíamos haber ahorrado alguna visita de haber sabido estas cosas.

Leyendo sobre el tema, en algún sitio (no recuerdo donde) leí que para buscar un piso hay que pensar cinco puntos que para ti sean muy importantes. Si una casa cumple con tres de esos cinco, hay que valorar la compra.

Mis puntos eran: dos o tres habitaciones, que fuera una planta alta (mínimo un cuarto piso) con ascensor, que tuviera orientación sur, que tuviera terraza y que estuviera en una zona concreta. El resto de cosas podía sumar puntos, como que estuviera reformada, que tuviera suelo de parquet, que fuera de un particular... Y las líneas rojas de Dani eran muy claras (el no pone requisitos, él sólo pone vetos XD), que no nos cobraran comisiones por vendernos la casa y que no se pasase del presupuesto. Que no hubiera que hacer obra también le motivaba bastante.

El caso es que, después de ver muchos truños, algunas cosas molonas pero que no nos cuadraban del todo (perdí mi oportunidad de tener una casa con piscina, snif...), o en otras zonas (que a mí me costaba bastante la idea de cambiar de barrio), al final el día que vimos nuestra futura casa yo no me lo creía mucho. Cumplía casi todo lo que necesitábamos: a dos calles de nuestra casa, planta alta con ascensor, orientación sur y terraza, reformado hace poco y nos gustó bastante la reforma. Y dentro de nuestro presupuesto, claro. Cuando hicimos una oferta y nos dijeron que sí yo no hacía más que pensar que dónde estaba el truco. Hoy, seis meses después, ya he entendido donde está el truco, que han tardado una barbaridad de tiempo en darnos la casa (esperemos que llegue en los próximos días).

No hay comentarios: