Mi cuerpo, mi mente y yo.

No sé qué coñosss me pasa últimamente que mi cuerpo no me da tregua. Deben ser los estreses y esas cosas que me pasan de un tiempo a esta parte (vamos, desde que veo el examen bien cerquita). No quiero entrar en escatologías demasiado vívidas (tema de conversación estrella en los viajes, ya se sabe), pero en esta ocasión ha sido mi tripita la que me está dando por... saco. Y es que anoche, a eso de las tres y media de la madrugada, el váter y yo nos convertimos en uno (be water, maifrend). Con lo cuarrr llevo todo el día bastante jodidilla, aparte de por lo ya mencionado, porque tengo más sueño que una cesta de gaticos al lao de una estufa.*

Estoy trabajando ya en mis verbalizaciones positivas, de cara al examen y otras gilipolleces. Parece una tontería, pero decirte a ti mismo cosas positivas y reales de vez en cuando anima bastante y neutralizan todas esas otras cosas negativas e irreales que solemos decirnos. Otro día (con más tiempo) puedo hablar de las maravillas de la reestructuración cognitiva, pero por poner un ejemplo tonto (aplicable a todos los que le damos más importancia de la que tiene a los fracasos interpersonales, yo la primera):

- No tengo que caerle bien a todo el mundo. Me gusta caer bien a la gente pero no es una obligación ni un requisito imprescindible para poder ser feliz. Mi mundo no se viene abajo porque a una persona no le guste como soy o mi forma de ser. No le puedo gustar a todos. Y no me puedo valorar por lo que los demás piensen de mí, porque yo soy la que mejor me conozco. Vamos, que si te gusto, bien, y si no... pues también.

¡Ole ahí! Arriquitrauntrauntraun... Beck estaría orgulloso de mí.

Por lo demás todo correcto: trabajar, estudiar, trabajar, estudiar, etc. El fin de semana ampliado ha sido una gozada... No sé qué decir. No se me ocurre ninguna expresión lo suficientemente casta para que no se escandalizasen mis progenitores. Cualquier cosa que saliese de mis dedos en este momento tendría esa mezcla tierna y porner tan característica y que tanto me gusta. Se me ha hecho muy corto, pero bueno. Mi niño** se ha ido hoy a Barcelona, a visitar a todos los amigos y familia adoptiva que tiene allí. Se me hará raro no verle hasta el lunes. Espero que se lo pase muy bien... Y que a mí se me pase volando :P

* Gracias a Julián López por este símil que me embelesa.

** Ya he cambiado el chip. La expresión se ha transformado de "mis niños" (chanantes) a "mi niño" (y punto). Uff... quién me ha visto y quién me ve. Soy una superñoña como la copa de un pino. XD

PD: Como nos falló en el radiocassette, pues la pongo aquí.

PD2: No tengo tiempo para actualizar tanto como me gustaría, ni para comentar otros blogs tanto como querría, ni para hacer el memo por internet tanto como... eso.
PD3: Viendo el título de la entrada creo que debería cambiar la etiqueta y poner: Yo soy asín... de egocéntrica.
PD4: ¡¡¡No se olviden del chachachá, por favor!!!