miércoles, 9 de mayo de 2007

Nunca te acostarás...

No, el título no es lo que pienso cuando estoy negativa y veo a a mi bigotitos del autobús 152C.

Cada día que pasa me doy cuenta de que soy paleta en esto de internet hasta decir basta. Ayer, leyendo el
blog de BGTA vi que había puesto un link a mi post del lunes. ¡Qué ilusión más tonta me hizo! Produce una sensación muy gratificante eso de que lean tus cosas por ahí fuera. El caso es que comentaba que yo había hecho un meme y yo pensé ¿A lo cualo? ¿Me estás llamando mema? Ya sé que lo soy un poco, pero tampoco hay que pasarse ¿no? Me fui directa a la Wikipedia y encontré esta definición. Total, que me quedé como estaba, más o menos.

Proseguí mi búsqueda (no muy extensa) y un par de páginas más allá encontré algo más esclarecedor, por ejemplo en
ecuaderno. Resulta que un meme son las gilipolleces esas que alguien escribe, tipo cuestionario-mi canción favorita-mi comida favorita-mi flor favorita, la pone en su blog y anima a otros bloggers a hacerlo o las envía por correo a todos sus contactos para que también lo contesten. Son todas esas preguntas que cuando te las mandan piensas: Mmm yo contestaría esto o lo otro, y al final se quedan ahí, en la papelera de reciclaje. Bueno, más bien al revés (digo yo), las gilipolleces esas son memes (memeces, está claro). Mi manera de explicar las cosas es totalmente sui generis: Estas cosas son memes pero los memes son más cosas. Claro, ¿no?

Vamos, que en mi primer meme (increíblemente nunca había hecho ninguno) lo he hecho todo mal: no me lo han enviado ni invitado a contestar (simplemente lo he tomado prestado), no he puesto el link a mi
fuente, ni a los blogger que me gustaría que lo contestasen. Sólo me ha faltado gritar ¡¡¡yeeeeeeehaaaaaa!!!

Si ya lo decía mi abuela: nunca te acostarás sin aprender algo nuevo.